Y eres gota
Y eres gota que se transporta. Estás aquí y al sonido del piano comienzas a pasear, resbalando por la silla, avanzas por el piso hasta alcanzar los cristales de la ventana. Y en una loca carrera con las otras gotas, luchas por mantenerte un tiempo ahí. Observas la calle: gotas que llenan la acera, que riegan los árboles, que caen de los paraguas. Y en tu redondez, se refleja lo que ves, dos mujeres que hablan, un viejo que toca el piano y tú, gota que escapas, buscando la libertad.
Gracias, Carlos, recién descubro esta publicación que hiciste hace ya más de 9 años. Un saludo.
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